Esta fue la primera ponencia que inauguró el primer ciclo de Conferencias en Ciencias Políticas y estuvo a cargo de Kevin Young, doctorante en Historia de la Universidad Stony Brook de Nueva York (EE.UU.).
En el siguiente reproductor de audio usted puede escuchar o descargar toda la ponencia. Asimismo, compartimos más abajo la sinopsis de la ponencia y luego usted puede leer y/o descargar el texto de toda la presentación al final de este artículo. Agradecemos sus comentarios y sugerencias.
Esta ponencia se enfoca en los factores externos implementados por el gobierno de los Estados Unidos en el proceso revolucionario y que influyeron en la ‘derechización’ de la dirigencia revolucionaria, en las décadas de los años 50s y 60s. El gobierno norteamericano promovió golpes de estado e intervenciones violentas en América Latina. Sin embargo, esta hostilidad militar no se materializó en Bolivia. Por el contrario, Young propone que ‘el gobierno norteamericano miraba a la revolución boliviana como una especie de laboratorio, o “experimento”, cuyo resultado tendría implicaciones vitales para el poder norteamericano en el resto del hemisferio’.
Bolivia, en tanto ‘experimento’ –ante todo de política económica– sirve a los intereses del gobierno norteamericano en contraposición discursiva y al ‘modelo cubano’ de revolución. Así, la ponencia se enfoca en tres momentos específicos del periodo postrevolucionario: el Código petrolero 1955, el Plan de estabilización de 1957 y el denominado Plan triangular (para la industria minera) de 1961.
Young durante su presentación |
El debate posterior a la ponencia, y a manera de conclusiones adicionales haciendo un paralelismo con el contexto histórico actual, se sugirió que sigue habiendo una lucha/competencia por el control sobre los recursos naturales, hoy reproducida históricamente en los mismos recursos naturales: el gas y los minerales.